16/12/09

Abre mi regalo

Aquí tienes un cofre. No es un cofre cualquiera. Tienes que prestar atención y no perder detalle. Es importante que te prepares para experimentar las sensaciones de un regalo imprevisto, un regalo sin un por qué pero con muchas razones.
Si te fijas en la inscripción, verás tu nombre escrito con tinta indeleble. Quiere decir que es para tí.
Cuando lo abras se despertarán los nuevos sueños almacenados en este último año; se despedirán de tí los malos momentos; a tu memoria se coserán las imágenes felices y a tu corazón la dicha de los sentimientos sinceros.
Cuidado cuando se destapen las ilusiones, has de atraparlas sin miedo, con rapidez y precisión, de ello depende que en el nuevo año se cumplan.
En cuanto a las decisiones complicadas, simplemente déjalas fluir. No conviene forzarlas, aflorarán con tu instinto.
El pasado hará acto de presencia pero tienes que saber cómo manejarlo. Que no te influya demasiado, ya sabes: "todo pasa y todo queda". En cuanto al futuro, recuerda que es una quimera y es efímero así que huye de las expectativas y concéntrate en el presente, que es el seductor por excelencia y el que realmente te va a hacer disfrutar.
En el fondo del cofre deberás desatar el lacito que rodea el sobre verde esperanza. Es muy importante. En él están guardados para tí todos mis mejores deseos. No me he olvidado de ninguno así que espero que puedas rescatarlos todos, eso querrá decir que mi regalo habrá merecido la pena.
Ah! y antes de cerrar el cofre de nuevo, cerciórate de que has hilado todos los pespuntes de tu nuevo año y de que no hay ninún hilo suelto.
Al cerrar fíjate en la inscripción porque debajo de tu nombre se dibujará una sonrisa.