Estoy muy feliz y no se me ocurren más palabras aparte de ilusión e ILUSIÓN pero no necesito más porque ha sido precisamente la ilusión la que me ha concedido que el soñar fuese también el despertar a lo largo de mi vida. Colaborar en esta revista junto a otras personas cuyos blogs sigo y admiro es para mí una gran satisfacción personal, sobre todo por el desafío que me pongo por delante al intentar aportarle algo nuevo al colectivo celiaco y a todos aquellos otros interesados que se detengan en esta sección. Mi cocina está abierta para todos vosotros.
Mi colaboración en este número de noviembre ha sido, sin duda, otoñal, siguiendo la tónica general del mes en el que nos encontramos; del aire casi ya frío que se respira; de los tonos de esas tardes que ya se tornan oscuras y más melancólicas; de la hojarasca ocre, amarilla y rojiza que tiñe el suelo; y de esos sabrosos productos que nos ofrece esta estación. De ahí mi elección de setas, calabaza, naranja, avellana... Por otro lado, también encontraréis un artículo donde reúno los variadísimos tipos de sustitutos de la harina con gluten y sus usos porque son muchas las posibilidades y excelentes los resultados.
Os adelanto unas fotos y con ellas os invito a leer detenidamente todas recetas de la revista, que sin duda os encantarán. Yo sigo soñando... despierta.
