Entre rayo de sol y rayo de tormenta ha llegado julio al compás de nubes pasajeras que vienen y van sin que podamos adivinar si se van a instalar definitivamente o nos van a dejar disfrutar de una estación que aquí parece no existir.
Pasar un día en el mar da serenidad e inspira y las frutas de temporada son el resultado de recetas magníficas para las que no suelo tener demasiado tiempo, aunque Léa parece haber comprendido que a mamá le gusta cocinar y a ella aprender, a juzgar por su sonrisa mientras me supervisa desde su silla.
Hemos salido a pasear y al pasar por el puesto de frutas de la esquina, hemos escogido unos estupendos albaricoques para un clafoutis muy sencillo y jugoso.
c l a f o u t i s d e a l b a r i c o q u e s
- 3 huevos
- 8 cucharadas de azúcar
- 3 cucharadas de harina de castaña (o de maicena en su defecto)
- 175g de mascarpone
- 100ml de leche
1. Precalentar el horno a 180ºC.
2. Lavar los albaricoques, cortarlos a la mitad y quitar el hueso.
3. Batir los huevos y el azúcar hasta obtener una crema.
4. Añadir las cucharadas de harina, seguidamente el mascarpone y por último la leche poco a poco sin dejar de batir.
5. Engrasar un molde o varios con mantequilla y colocar las mitades de los albaricoques. Por último añadir el líquido.
6. Hornear durante 30 minutos aproximadamente.
7. Sacar y dejar enfriar.