26/6/13

entrada del verano y una tarta de ruibarbo

El verano ha entrado aunque todavía no nos demos cuenta. Las frutas de temporada se ven tan apetitosas en todos los puestos del mercado que animan a hacer miles de tartas.

Dejo que os asoméis a la ventana de Singulares Magazine para disfrutar de una rica tarta de crema tipo flan y ruibarbo que no os defraudará. Tampoco os defraudará el nuevo número de la revista on-line de Singulares que acaba de salir hace unos días.


16/6/13

de tartas y besos

Mi hermano adora la tarta de queso. A decir verdad adora cualquier tipo de tarta.Y a decir más verdad, adora las tartas de su hermana, o sea, yo. Con lo cuál, para qué engañarnos: cuando viene a vernos, postre va, postre viene.


Base de speculoos, relleno de ricotta y topping de mermelada de fresa casera, fresas naturales y crumble de pistachos y vainilla.


Pero realmente es evidente que mi hermano ya no viene por mis tartas (que también), sino por su sobrina. La adora. Hace años que no le veía sonreír tanto.


r i c o t t a   c h e e s e c a k e

Base de speculoos:
- 100g de galletas speculoos sin gluten
- 50g de mantequilla

Relleno:
- 500g de queso ricotta
- 125ml de crème fraîche
- 150g de azúcar
- ralladura de corteza de limón
- 2 huevos

Topping:
- 150g de mermelada de fresa
- fresas para decorar
- crumble de pistacho

1. Calentar el horno a 200ºC.
2. Engrasar un molde redondo desmontable.
3. En un procesador picar las galletas speculoos y la mantequilla y forrar la base del molde con dicha pasta. Hornear durante un cuarto de hora. Sacar y dejar enfriar. 
4. Batir el ricotta, el azúcar, la ralladura de limón, los huevos uno a uno y la crème fraîche por último. 
5. Poner a cocer agua. Meter el molde en un recipiente más grande para cocer al baño maría y verter la mezcla anterior en el molde forrado con la base de galletas. Añadir el agua cocida al recipiente.
6. Tapar la superficie con papel albal si se quiere que el resultado sea blanco y que no se tueste.
7. Hornear durante 50-60 minutos al baño maría.
8. Sacar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla y luego en el frigorífico toda la noche o durante 12 horas.
9. Desmoldar y decorar con mermelada de fresas, fresas y crumble de pistacho (opcional).
10. Servir a temperatura ambiente o fría.

10/6/13

summer gatherings {et quelques petits plaisirs...}

Este fin de semana llegó el verano y con él la visita de nuestros amigos Olaya y David, de Studio Duermevela. Siempre que alguien viene a casa nos encanta ser buenos anfitriones: preparar con mimo la visita y agradar.

Conozco a Olaya desde hace tiempo y sé que valora mucho los pequeños detalles: ahí donde pone el ojo, pone su cámara. Compartimos inspiración y otras muchas cosas. De David es mejor no escribir, hay que leerle.


Un capazo lleno de productos del mercado del miércoles en Chatelain: frambuesas, manzanas, cerezas, queso, tomates, espárragos y flores frescas me trajo a casa ideas para el menú de la comida.


Disfrutamos de una agradable comida con Léa gateando y asomando la cabecita desde debajo de la mesa. El postre siempre es la mejor manera de terminar una comida y las migas en los platos son el mejor resumen de todo lo compartido en ella.


p a s t e l i t o s   d e   c h o c o l a t e   g i a n d u j a   y   c e r e z a s

- 150g de mantequilla
- 125g de harina de arroz
- 25g de harina de mijo
- 200g de chocolate gianduja
- 125g de azúcar
- 4 huevos
- 1 cucharadita de bicarbonato sódico
- 100 ml de nata líquida
- 100g de chocolate gianduja
- cerezas para decorar

1- Precalentar el horno a 180ºC y engrasar unos moldes pequeños de mini muffins o que tengan el fondo un poco saliente para luego poder verter en el hueco el chocolate caliente.
2- Fundir el chocolate y la mantequilla al baño maría, dejar enfriar y reservar.
3- Separar las claras de las yemas de huevo.
4- Batir las yemas y el azúcar unos cinco minutos en batidor eléctrico hasta que se forme una crema. Añadir el chocolate y la mantequilla fundidos y mezclar bien. Seguidamente las harinas y el bicarbonato sódico y mezclar con el batidor manual ligeramente.
5- Por último, montar las claras a punto de nieve y añadir a la masa anterior con movimientos envolventes para no perder el aire adquirido.
6- Repartir la masa en los moldes previamente engrasados. Hornear durante 20 minutos.
7- Sacar del horno, dejar enfriar sobre una rejilla y desmoldar.
8- Fundir los 100g de chocolate en los 100ml de nata. Repartir en la superficie de cada pastelito y colocar la cereza mientras la salsa de chocolate esté caliente para que se quede pegada cuando enfríe.

b r o w n   b u t t e r - c a n d i e d   a p p l e   c l a f o u t i s  
(receta de Aran Goyoaga, Small Plates & Sweet Treats)

2/6/13

Bretaña y unas galettes



Nunca había imaginado el azul turquesa del mar de la Bretaña francesa, Sus tonalidades me embriagaron, son quietud para el alma y también para el espíritu. En la inmensidad de esta playa no queda lugar para la apatía o la preocupación, es el lugar perfecto para ensanchar los pulmones y liberarse de todo.

Cuando preparamos las maletas nos gusta planificar pero sobre todo, una vez dentro del coche, dejarnos llevar por el instinto. Al final, nos salimos siempre de la ruta marcada y esos son los maravillosos momentos en que, de repente, descubrimos lugares como este.

Nadie habló durante minutos y ese silencio fue el mejor en mucho tiempo.


Monsieur et Madame Coquille nos recibieron en su magnífica casa de Saint-Malo rodeada de flores perfectas, cabras y ovejas. Bucólico, rústico y familiar... a mi gusto.


La belleza allí reside en todo: en los pueblos, en los mercados, en los campos, en la comida, en el mar, en la gente, en las flores, en el marisco...


Cuando veo cestas llenas de flores recién compradas, me alegro de que vivir en esta parte de Europa me haya enseñado la maravillosa costumbre de hacer acopio de flores frescas al menos una vez a la semana.


Cancale, Dinan, Dinard y... Mont St. Michel: un triángulo perfecto en el medio del mar o del no mar, según las mareas. Hablar de Bretaña es como hablar de Asturias: el verde, la cultura celta, la lluvia, la sidra y nuestros frixuelos que ellos sustituyen por "galettes": diferentes ingredientes, mismo estilo.


Las clásicas galettes solo llevan harina de sarraceno, por lo que me encanta poder comerlas. A la vuelta no me he podido resistir a prepararlas con su también clásica salsa "caramel au beurre salé". Pueden llevar un relleno dulce o salado y en ambos casos son irresistibles.


g a l e t t e s   d e   s a r r a s i n   a v e c   c a r a m e l   a u   b e u r r e   s a l é

- 100g de harina de trigo sarraceno
- 25g de harina de arroz
- 25g de almidón de tapioca
- 125ml de leche
- 125ml de agua
- 2 huevos
- salsa de caramelo para acompañar

- Mezclar el agua,, la leche y la harina y después añadir los huevos uno a uno hasta obtener una pasta lisa y homogénea sin grumos
- Dejarla reposar al menos una hora en el frigorífico.
- Pintar una sartén con mantequilla y calentarla a fuego medio.
- Con un cucharón ir vertiendo la masa en la sartén sacudiéndola en forma de círculo para que la masa quede bien extendida.
- Cuando comienza a cocer y salen pequeños agujeros en la superficie, dar la vuelta y cocer por el otro lado.
- Rellenar con la salsa en el medio y cerrar todos los lados para que no se salga.
- Servir cuando aún están calientes.