Por el lago paseaban los cisnes y, por el bosque, Léa y yo. El cielo amaneció despejado y de vez en cuando se colaban algunos rayos entre las ramas, ya desnudas, de los árboles.
La sensación de frío me hizo sentir viva y poner los pies sobre la tierra. Es como una terapia de choque para despertar y volver a la realidad.
De esa inspiración nacen estos cakelets. Y ahora dudo si es mejor olerlos mientras se hornean o comérselos al calor del radiador.
- 125g de mantequilla reblandecida
- 250g de azúcar
- 2 huevos
- 125ml de crème fraîche
- 2 cucharadas de zumo de naranja
- 1 cucharada de ralladura de naranja
- 1/2 cucharadita de cardamomo
- 200g de harina de arroz
- 50g de almidón de tapioca
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 125ml de buttermilk
Precalentar el horno a 180ºC y engrasar un molde para mini bizcochos.
En un bol se baten a velocidad media la mantequilla y el azúcar durante un par de minutos.
Se añaden los huevos uno a uno, dejando que se integre bien uno antes de añadir el siguiente.
Se incorporan: la crème fraîche, el zumo de naranja, su ralladura y el cardamomo en este orden.
A continuación se añade la harina mezclada con el almidón y el bicarbonato en tres veces intercaladas con el buttermilk y terminando por la harina en la última vez.
Se rellenan los moldes en una proporción de 3/4 aproximadamente.
Se hornean durante 30 minutos o hasta que se dore la superficie y al introducir una aguja salga limpia.
Dejar enfriar durante 10-15 minutos antes de desmoldar. Desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla otros 10 minutos.
11 comentarios:
Coincido contigo. No puede haber muchos planes mejores para el fin de semana que meter la nariz en el horno, y después arrimarse a un radiador y comerse esos cakelets mientras contemplas el invierno, sí señor.
¿con qué podría sustituir la crème fraîche? En España no es tan habitual como de Francia para arriba.
Además me sorprende porque creo recordar que eres celíaca (yo también) y usas muchos productos lácteos. Lo cierto es que a los intolerantes al gluten tampoco les suelen sentar bien, no recuerdo si era porque algo tienen que ver con la enfermedad o porque simplemente son difíciles de digerir.
Hola Mara, la crème fraîche la puedes sustituir por nata aunque sea mas liquida. El resultado será muy parecido o igual en este caso.
Soy celíaca pero uso lácteos porque no me sientan mal de momento. Mientras los siga digiriendo bien no me gustaría limitar más mi dieta. Espero que puedas hacer la receta. Besos
¡Que buenos deben de estar!
A mi me gusta el invierno. Me gusta más el otoño, es la estación que más me gusta, pero el invierno tien mucho encanto y personalmente, tolero mucho mejor el frío intenso que el calor intenso.
Besos.
A mi me encanta el invierno, el frío, los olores, la luz... pero reflexionando he llegado a la conclusión de que me encanta que haya estaciones por que cada una tiene su encanto y lo genial es poder cambiar.
a mi me apasiona este tiempo, poder ponerme todas mis bufandas, mis abrigos, saltar por encima de los charcos con las botas de agua, la lluvia cantando contra el cristal de mi habitacion mientras duermo...la nieve...y sobre todo inundar mi cocina con olores a canela, pasas, manzana...mmmm!!!!
PRIMAVERA, VERANO, OTOÑO, INVIERNO todo ello es VIDA!!!
Incluídos tus deliciosos PASTELITOS...
Feliz noche guapa :)))
Bonita reflexión sobre el invierno. Me encanta venir a vistarte por todas estas entradas que invitan a reflexionar sobre las pequeñas cosas del día a día y además nos regalas una buena receta que disfrutamos con la vista de esoas preciosas fotos.
Dando respuesta a Mara la creme fraiche se encuentra muy facilmente en Carrefour
Besotes
No es que no me gusta el invierno... es que es demasiado largo !
A mí también me encanta el invierno, la nieve e incluso la lluvia...
beso
Que buenos con cardamomo que me chifla.
Un saludito
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